viernes, 24 de mayo de 2013

The ascent of man: Why our early ancestors took to 2 feet

(University of York) A new study by archaeologists at the University of York challenges evolutionary theories behind the development of our earliest ancestors from tree dwelling quadrupeds to upright bipeds capable of walking and scrambling.

The researchers say our upright gait may have its origins in the rugged landscape of East and South Africa which was shaped during the Pliocene epoch by volcanoes and shifting tectonic plates.

Hominins, our early forebears, would have been attracted to the terrain of rocky outcrops and gorges because it offered shelter and opportunities to trap prey. But it also required more upright scrambling and climbing gaits, prompting the emergence of bipedalism.

The York research challenges traditional hypotheses which suggest our early forebears were forced out of the trees and onto two feet when climate change reduced tree cover.

The study, 'Complex Topography and Human Evolution: the Missing Link', was developed in conjunction with researchers from the Institut de Physique du Globe in Paris. It is published in the journal Antiquity.

Dr Isabelle Winder, from the Department of Archaeology at York and one of the paper's authors, said: "Our research shows that bipedalism may have developed as a response to the terrain, rather than a response to climatically-driven vegetation changes.

"The broken, disrupted terrain offered benefits for hominins in terms of security and food, but it also proved a motivation to improve their locomotor skills by climbing, balancing, scrambling and moving swiftly over broken ground - types of movement encouraging a more upright gait."

The research suggests that the hands and arms of upright hominins were then left free to develop increased manual dexterity and tool use, supporting a further key stage in the evolutionary story.

The development of running adaptations to the skeleton and foot may have resulted from later excursions onto the surrounding flat plains in search of prey and new home ranges.

Dr Winder said: "The varied terrain may also have contributed to improved cognitive skills such as navigation and communication abilities, accounting for the continued evolution of our brains and social functions such as co-operation and team work.

"Our hypothesis offers a new, viable alternative to traditional vegetation or climate change hypotheses. It explains all the key processes in hominin evolution and offers a more convincing scenario than traditional hypotheses." EurekAlert!

Actualización. El bipedismo pudo empezar en el paisaje agreste africano como respuesta al terreno
Andar erguido puede tener sus orígenes en el paisaje agreste del Este y Sur de África, que se formó durante el Plioceno por volcanes y cambiantes placas tectónicas, según concluye una investigación de la Universidad de York, en North Yorkshire, Reino Unido, publicada en 'Antiquity' .

Los homínidos, nuestros primeros antepasados, se han sentido atraídos por el terreno de afloramientos rocosos y barrancos porque ofrecía refugio y oportunidades para acosar a las presas. Pero también requiere una posición más vertical y andares para la escalada, lo que provocó la aparición del bipedismo.

La investigación de York, titulada 'Topografía compleja y Evolución Humana: el eslabón perdido' y desarrollada en colaboración con investigadores del Instituto de Física del Globo de París (Francia), desafía las hipótesis tradicionales que sugieren que nuestros primeros antepasados ??fueron expulsados ??de los árboles y se pusieron a dos pies cuando el cambio climático redujo la cobertura arbórea.

La doctora Isabelle Winder, del Departamento de Arqueología de York y una de los autores del estudio, explica: "Nuestra investigación muestra que el bipedismo puede haberse desarrollado como una respuesta al terreno, en lugar de una respuesta a los cambios de vegetación climáticamente impulsados".

"El roto e interrumpido terreno ofrece beneficios para los homínidos en términos de seguridad y alimentos y también resultó ser una motivación para mejorar sus habilidades locomotoras de escalada, equilibrio, lucha y moverse rápidamente sobre el terreno accidentado, unos tipos de movimiento que fomentan una marcha más erguida", añade esta experta.

La investigación sugiere que las manos y los brazos de los homínidos verticales fueron libres para desarrollar una mayor destreza manual y el uso de herramientas, un apoyo a una etapa clave en la historia evolutiva. El desarrollo de la ejecución de las adaptaciones del esqueleto y el pie puede ser el resultado de excursiones posteriores a las llanuras circundantes en busca de presas y nuevas áreas de distribución.

La doctora Winder afirmó: "El terreno variado también puede haber contribuido a la mejora de las habilidades cognitivas tales como la navegación y la capacidad de comunicación, lo que representa la continua evolución de nuestro cerebro y las funciones sociales como la cooperación y el trabajo en equipo".

A su juicio, esta hipótesis ofrece una nueva alternativa viable a la teoría tradicional de la vegetación por el cambio climático, explica "todos los procesos clave en la evolución de los homínidos y ofrece un escenario más convincente que las hipótesis tradicionales". europapress.es/

1 comentario:

salaman.es dijo...

Actualización. El bipedismo pudo empezar en el paisaje agreste africano como respuesta al terreno.