... Los yacimientos se localizan en el valle medio del río Salado de
Porcuna y ocupan varios cerros allanados de la campiña alta del valle
del Guadalquivir. Corresponden a un asentamiento que tuvo su origen en
el Neolítico Final-Cobre antiguo (III milenio a.C.) y que, con distinta
extensión e intensidad, ha mantenido una ocupación ininterrumpida hasta
la actualidad.
Como antecedentes de este poblamiento se protegen también, entre
otros enclaves paleolíticos, los de La Peña de la Grieta, los Farallones
del Sulfuro o la Cueva de los Enamorados, hábitats que se desarrollaron
al resguardo de pequeños abrigos en los bordes de los cerros de
Porcuna. Destaca especialmente el de la Peña de la Grieta, uno de los
primeros de este tipo investigados mediante excavación y comparable a
las conocidas cuevas de Ambrosio, en Almería, o las del Parpalló y Les
Mallaetes, en Valencia.
Al final del Neolítico las comunidades se asientan en las cimas de
los cerros de Los Alcores y El Albalate, donde crean sendos poblados
fortificados a unos dos kilómetros de distancia el uno del otro y
flanqueando el antiguo lago salado pleistocénico de Pescolar.
En la denominada época orientalizante o tartésica, [...] juntadeandalucia.es/ / Link 2
miércoles, 2 de julio de 2014
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