jueves, 3 de septiembre de 2015

Pottery brings to life the path of early Pacific people


Pottery fragments from New Guinea, top sherd is the earliest. Dylan Gaffney, Glenn Summerhayes, Anne Ford, Sue Bulmer
 
A 3000-year-old fragment of pottery has solved a mystery behind the movement of an ancient people of South East Asia into the Pacific.

These ancient colonisers - known as Lapita - carried with them agricultural plants derived from mainland New Guinea. However, until now there has been no evidence of an early connection between the Lapita and indigenous New Guineans.

Now, a new analysis of pottery pieces found at a site in the New Guinea Highlands reveals a connection dating back to the time before the Lapita moved into the remote Pacific.

The discovery is important because "it is suggesting on the way to the Pacific, the Austronesian-speaking people who went on to become the ancestors of Polynesians actually went on to mainland New Guinea," says study co-author Dylan Gaffney, from the Department of Anthropology and Archaeology at the University of Otago.

"Until recently it was thought they bypassed New Guinea and just migrated via outlying islands but [this find] suggests the Austronesian-speaking peoples developed ties with people living in the New Guinea Highlands on their way from South-East Asia to colonise remote Oceania," Gaffney says.

The Lapita people left Southeast Asia and entered the Western Pacific 4000-3000 years ago. About 300 years later they started heading east to become the first people to settle on the Solomon Islands, Vanuatu and Fiji, moving later to Samoa and Tonga.

Evidence of their settlement is found in the remains of intricately patterned pottery used for rituals.

Gaffney says the study, published today in PLOS One, is based on analysis of a number of pottery sherds excavated from Wanelek in the Kaironk River valley, in the New Guinea Highlands in the 1970s. [...] ABC / Link 2 


Actualización 07-09-15: Cerámica de Papúa Nueva Guinea desde un pasado mucho más lejano de lo asumido — NCYT
Unos arqueólogos han desenterrado la pieza de cerámica más antigua conocida de Papúa Nueva Guinea en un lugar sorprendentemente remoto de las tierras altas.

La pieza de cerámica roja brillante, con dibujos en su interior, tiene 3.000 años, varios cientos de años más que la cerámica más antigua conocida con anterioridad en Nueva Guinea.

La pieza se encontró en la región de las tierras altas, muy lejos de la costa donde había un contacto regular con otras culturas marinas que hacían cerámica, como la cultura Lapita.

El equipo internacional de investigación determinó las fechas precisas para una serie de piezas de cerámica encontradas en el yacimiento arqueológico de Wañalek, en la Cordillera de Bismarck, en la provincia de Madang de Papúa Nueva Guinea.

Es un ejemplo de cómo la tecnología de la cerámica se extendió entre las culturas, tal como indica Tim Denham, de la Universidad Nacional Australiana, uno de los miembros del equipo de investigación.
Una hipótesis plausible sobre cómo se implantó esa tecnología en Papúa Nueva Guinea es que algo de cerámica fue a parar pronto a las tierras altas, lo que inspiró a sus habitantes para intentar confeccionarla por sí mismos.

El hallazgo ayudará a los arqueólogos a reconstruir el proceso de propagación de las técnicas cerámicas desde el sudeste de Asia a través del Pacífico, y proporciona información amplia sobre la forma en que esa clase de tecnología se expandió por las civilizaciones del pasado.

En la investigación también han trabajado expertos de la Universidad de Otago en Nueva Zelanda.

1 comentario:

salaman.es dijo...

Actualización: Cerámica de Papúa Nueva Guinea desde un pasado mucho más lejano de lo asumido — NCYT